¿Cómo solucionarlo?
Bien, se trata de evitar el ruido de los martillazos. Como no puedo reducir su potencia (véase potencia eficaz), habrá que producir un sonido con más potencia que haga mínimo el ruído de los martillazos. Ahora bien, me gustaría no reventar mis oídos. La solución, como tantas otras veces, proporcionada por 3M, tapones para los oidos.
¿El problema? He conseguido dejar de oír martillazos, ahora oigo música a un nivel de volumen y calidad bastante bueno, sin embargo… mi estómago está como si le estuvieran dando puñetazos desde dentro, maldita teoría de ondas :(
Conclusión: En teoría, la teoría y la práctica son lo mismo, en la práctica no lo son.
¿Entonces? Bien, habrá que irse al salón a estudiar. Y recuerde, vecino…
Revenge is a Dish Best Served Cold. (Kill Bill)